El regulador de buceo es una inversión importante, por lo tanto, debemos tener claro que vamos a comprar y todo lo que necesitamos. No podemos ir al agua sin el, pero debemos saber cuando comprarlo y cuando alquilarlo. Los reguladores son fáciles de transportar, pero delicados. Un regulador no será nuestra primera pieza del equipo con toda seguridad.
Hay varias configuraciones dentro del mundo del submarinismo, pero básicamente en el buceo deportivo está compuesto por:
Es la que va conectada a la botella y a ella se conectan el resto de componentes. Se encarga de rebajar la presión de la botella a una presión ligeramente superior a la del entorno. Las hay de tipo DIN o INT. Según el país se utiliza mas uno u otro. El modelo INT es más utilizado en equipos de alquiler por su comodidad, sin embargo, el modelo DIN de 7 roscas nos permite utilizar botellas de 300 bares (aunque en Europa apenas se utilizan). Suelen tener salidas de baja presión y salidas de alta presión. Las de alta presión se utilizan para el manómetro o un transmisor inalámbrico. El resto se conectan en el de baja presión. Por seguridad, son de diferentes tamaños. Si dudas que modelo comprar, elige INT.
Una membrana sobrecompensada lo notaremos mucho a la hora de bucear. A mayores suelen traer un kit de aislamiento y anticongelamiento que ya puede no resultarnos necesario para inmersiones normales.
Es el regulador que llevaremos en la boca todo el tiempo. Su combinación con la primera es fundamental. Esta será la que nos facilite el aire que solicitemos. Están diseñados para que en caso de fallo, queden en flujo continuo. Es la pieza clave de un buen buceador.
Por seguridad, debemos llevar una fuente de aire alternativa u octopus, en una zona situada en el triangulo formado por nuestra barbilla y nuestras costillas. De un color llamativo y de fácil acceso. Suelen ser de una calidad inferior a la principal. Es conveniente comprobar su funcionamiento cada cierto tiempo.
Nos mostrará la cantidad de presión restante en la botella. Puede llevar integrados otros instrumentos como la brújula, profundímetro, ordenador de buceo, etc.
Para poder inflar el jacket de buceo, necesitaremos un latiguillo de baja presión. También en caso de utilizar un traje seco
Algunos ordenadores modernos nos muestran el consumo y la presión de la botella, a través de un accesorio llamado transmisor inalámbrico. Aunque se puede conectar directamente, se suele utilizar un latiguillo corto en una salida de alta presión de la botella.
Para ir a por equipo propio, debemos tener dinero para comprar algo mejor que lo disponible para alquiler. Es un material que se recomienda comprar siempre nuevo. De esta forma tenemos claro en que condiciones está. Si buceas muy poco te será mejor alquilarlo.
Lo más importante, es tener claro que reguladores queremos combinar. Posteriormente buscaremos ofertas de packs y compararemos con adquirir todo por separado. Debemos tener en cuenta, que por muy bajo de gama que sea, no gastaremos menos de 300 €. Las tiendas suelen tener alguna oferta permanente y la diferencia en precio de una tienda a otra puede ser de unos cuantos euros.
Es necesario realizar un mantenimiento anual, o cuando invernemos nuestro equipo. Es necesario realizarlo en una casa autorizada o servicio técnico. Puede haber una diferencia grande de coste de una marca a otra, así que recuerda ver los precios para no llevarte sorpresas.
Aunque hay bastante competencia en el mundo scuba en cuanto a este equipo, las referencias más utilizadas distinguen del resto. Cressi, Scubapro, Mares y Apeks tienen muy buenos productos. Aqualung se está haciendo con su mercado, aunque es más difícil verlos.